«Desde las cavernas escribo»
Desde las cavernas escribo
De mi mente:
desde la angustia
a puerta cerrada de mi cráneo,
en coma mis letras y mis dedos,
hacia vuestros ojos
que saben de grutas oscuras.
Desde las cavernas escribo.
Haciendo voto de poeta loco
en celibato de leyes y ritmos
me alzo -de la maravilla- en juez,
que no todo lo que quema es fuego.
Desde las cavernas escribo.
Por vuestras manos
y las mías,
por lo que nacerá en silencio,
dadme. La poesía que rompe, dadme.